Me levanto, miro la hora, puede ser muy temprano o muy tarde, eso por lo general da lo mismo. Tomo un cigarro y lo dejo en mi boca apagado mientras voy a la cocina y preparo café, pongo la taza en el microondas y apretó el botón de inicio, abro la puerta de la calle y dejo entrar a simone para que huevee un rato en la casa, me devuelvo, prendo el cigarro hasta que el sonido indica que el café está listo, voy a la pieza, inicio el computador y reviso lo de siempre, facebook, correo y a veces el diario, apago un cigarro y a veces prendo otro.
Pongo música fuerte, si es antes de las 06.00, los vecinos golpean la muralla, pienso que podría aprovechar el tiempo de la mañana en algo mejor que estar vegetando frente al pc, pero mientras le doy vueltas, el tiempo pasa y lo único que hice fue vegetar mientras pensaba que podría haber hecho algo mejor.
Voy a prender el calefón, pongo otro café en el microondas, me ducho, salgo, prendo la tele, me visto, me tiro en el sillón y a veces leo alguna cosa que haya por ahí mientras tomo el café, apago el pc y salgo. Eso es básicamente todos los días, en el fondo me agrada, me hace ansiar las vacaciones, no todos los días son tediosos, hay un par de ramos que me agradan de la U, supongo que dos días de ánimo son suficientes para una semana de “esperar que pase rápido esta mierda”.
EL GENIO DE LA MULTITUD – Charles Bukowski -
Hay suficiente traición y odio,
violencia.
Necedad en el ser humano
corriente
como para abastecer cualquier ejercito o cualquier
jornada.
Y los mejores asesinos son aquellos
que predican en su contra.
Y los que mejor odian son aquellos
que predican amor.
Y los que mejor luchan en la guerra
son -AL FINAL- aquellos que
predican
PAZ.
Aquellos que hablan de Dios.
Necesitan a Dios
Aquellos que predican paz
No tienen paz.
Aquellos que predican amor
No tienen amor.
Cuidado con los predicadores
cuidado con los que saben.
Cuidado con
Aquellos que
Están siempre
Leyendo
Libros.
Cuidado con aquellos que detestan
la pobreza o están orgullosos de ella.
Cuidado con aquellos de alabanza rápida
pues necesitan que se les alabe a cambio.
Cuidado con aquellos que censuran con rapidez:
tienen miedo de lo que
no conocen.
Cuidado con aquellos que buscan constantes
multitudes; no son nada
solos.
Cuidado con
El hombre corriente
Con la mujer corriente
Cuidado con su amor.
Su amor es corriente, busca
lo corriente.
Pero es un genio al odiar
es lo suficientemente genial
al odiar como para matarte, como para matar
a cualquiera.
Al no querer la soledad
al no entender la soledad
intentarán destruir
cualquier cosa
que difiera
de lo suyo.
Al no ser capaces
de crear arte
no entenderán
el arte.
Considerarán su fracaso
como creadores
sólo como un fracaso
del mundo.
Al no ser capaces de amar plenamente
creerán que tu amor es
incompleto
y entonces te
odiarán.
Y su odio será perfecto
como un diamante resplandeciente
como una navaja
como una montaña
como un tigre
como cicuta
Su mejor
ARTE.-
La historia es cíclica – A. Retcel, 2004-
¡no…, de nuevo no, por favor otra vez no! Decía mientras se revolcaba con las manos en el estomago… le había costado dos años de letras, tres sobredosis, varias pastillas, muchas cajetillas de cigarrillos, muchos litros de alcohol, varias cicatrices, horas de insomnio y un aparente don introspectivo… pero ahí va todo de nuevo. ¡no, no de nuevo, por favor! Decía y repetía, de noche solo con las manos en el estomago, como si fuera un maldito calambre.
Raro – A. R. 2004-
¿Cómo puede haber gente que hable con los animales? – le decía – y él sólo le movía la cola.